Denunciar las relaciones de poder ocultas; despertar resistencias; permitir la expresión de voces muy a menudo acalladas; producir saberes verdaderos capaces de enfrentar a las gubernamentalidades dominantes; desafiar nuestras libertades y nuestras facultades de acción; hacer surgir la historicidad de nuestros sistemas de saber, poder y subjetivación; mostrar que nada en nosotros es fatalidad; en definitiva, cambiar nuestras vidas: esta es la tarea del filósofo, según Michel Foucault. A partir del análisis de sus obras, este..